¿Y AHORA...? (SEGUNDA PARTE)

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EL FUTURO

Ahora surge un interrogante muy importante en cuanto al semestre que se avecina, es evidente que San Lorenzo no puede contar con un plantel profesional tan numeroso (30 profesionales) y con una ficha tan alta (especialmente en algunos casos en particular), y más teniendo en cuenta que se va a tener que hacer frente a solo un torneo, a no ser que este confirmado que el campeón de la próxima Copa Sudamericana clasifique directamente al Mundial de Clubes, objetivo que estaríamos viendo todos con buenos ojos; pero de todas maneras, los números financieros del Club no son muy alentadores, a pesar que desde el gobierno se diga lo contrario, y si no queremos poner en riesgo el futuro de la Institución, vamos a tener que empezar un proyecto con base de Cicloneta, y no malgastar tanto dinero por Europa y alrededores. Por dar un ejemplo en concreto, el nivel de D’Alessandro no fue ni por lejos el esperado por cualquier hincha, y en este jugador se invirtieron €14.000.000 y un contrato que se está pagando con los ingresos de publicidad de la camiseta; ¿hacía falta semejante inversión, o se podía apostar a alguna perlita santa como Montillo o D. Bottinelli? Porque lo que últimamente noto es que en la cancha, cuando un juvenil QUE SALIO DEL CLUB comete alguna equivocación se lo manda al muere, y se lo insulta de mil maneras, y enseguida pedimos el cambio, y cuando un jugador, que nos costo más de lo que nos puede salir trasladar el Estadio a Boedo, comete una equivocación se le tiene más comprensión y se le mete menos presión. Creo que en estos casos el hincha de San Lorenzo se está equivocando y creo que necesitamos darle más apoyo a los jugadores que salen de las inferiores. Aguirre no es más que Bianchi Arce, y por más que haya jugado los últimos tres partidos como un jugador de nivel de primera división, siempre tiene un error que nos puede costar el partido, y que le tuvimos que bancar un semestre desastroso, pero que ahora ovacionamos cuando deja la cancha, en contra posición, cuando Bianchi Arce da un mal pase, o rechaza mal una pelota, enseguida se lo señala, y recodemos que no tiene más de 20 años. Y la lista puede ser larga, muchos se contentaron con la venta de Ortiz (que ni si quiera se recuperó lo gastado por Aguirre); se contentaron por la venta de Montillo. Voboril es otro ejemplo, seis meses atrás era un fenómeno, tuvo una lesión que lo dejó marginado de las canchas durante un período prolongado de tiempo, y el primer partido que regresó se lo marcó en cuanto error tuvo. ¡Ah! D. Bottinelli la está rompiendo en Chile. Peirone está colgado. Claudio Acosta ni se tiene en cuenta. Chávez demostró que es un jugador de primer nivel junto a Bianchi Arce, especialmente cuando se los tiraron para que se arreglaran como pudieran a los 4000 y 2800 mts de altura de Potosí y Quito. En fin ejemplos sobran para demostrar que hay que empezar a valorar de verdad nuestras divisiones inferiores, y no darle tanto valor a jugadores que vienen de afuera, especialmente cuando estas inversiones son un riesgo para la institución por el valor de sus transferencias y sueldos. Si la copa y el campeonato están perdidos no quiero ni imaginarme el campeonato económico que tanto pregonan en el oficialismo.
Es hora de replantearse el futuro proyecto de San Lorenzo, y sentar su base en los chicos que desde abajo vienen peleando para llegar a primera división, lleguemos a la Libertadores 2009 con un equipo ya formado, y no con un equipo en formación; y recordemos que la copa no solo se gana en la cancha y en los tablones, también se gana en los escritorios, y todos sabemos que con esto no quiero decir se arreglen partidos... eso, no nos hace falta...

¿Y AHORA...? (PRIMERA PARTE)

¿QUE HACEMOS CON ESTOS?

Orión, Aguirre, Bottinelli, Placente, “Chaco” Torres, Rivero, Bilos, D’ALESSANDRO, Silvera, Bergessio, Emiliano Díaz, Michael Díaz, Ramón Díaz, Rambert, Montillo, Darío Bottinelli, Ortiz, Bianchi Arce, Chávez, Voboril...


UN AÑO SEPULTADO POR EL FRACASO LIBERTADORES.

Nuevamente, sufrimos una expulsión en una instancia decisiva de un partido que definía el futuro de todo un año, las ilusiones de todo un pueblo, el destino de un plantel que había sido ¿preparado? para llegar al objetivo mínimo que era alcanzar la final de la Copa Libertadores (noten que no nombré la palabra campeón) que le fue esquiva a San Lorenzo desde sus inicios, en un principio por negligencias dirigenciales, luego por vendettas de los jugadores, por caprichos de técnicos, o por jugadores poco inteligentes, o por un poco de todo.
El cóctel “explosivo” para esta nueva edición de la Copa en el año del Siglo Santo, el equipo Santo fue preparado con grandes estrellas de fútbol mundial (¿?) que se encontraban con un ritmo y nivel de juego que podemos tener nosotros luego de tomarnos 15 lts de cerveza mezclados con 20 lts de fernet puro sin cola.
La preparación del equipo libertador comenzó en Junio del año pasado, con contrataciones de nivel como Bernie Romeo, Bilos, Aguirre, y estrellas como Emiliano Díaz, y Michael Díaz; tuvimos regresos de jugadores a préstamos que habían mejorado sustancialmente el nivel, como Montillo, D. Bottinelli, Ortiz, y otras incorporaciones que estaban destinadas al futuro como “Batman” Díaz, Morales Neumman (ex River), Lautaro Formica (jugó un solo partido en la primera mostrando un gran nivel, y no lo vimos nunca más); el objetivo principal de ese semestre, con el nivel de jugadores y la base del equipo campeón (recordemos que regalamos a Lavezzi y Ledesma), era el Bicampeonato. Resultados: nivel paupérrimo de juego (en un campeonato más accesible que el Clausura que habíamos ganado hacía un par de meses), un punto menos que nuestro hijo de patricios, mitad de tabla, y despedida de la mediocre Copa Sudamericana en primera fase frente al débil Arsenal de Sarandí (que luego se coronó campeón). ¿Algo para destacar? Los triunfos frente a Blanquiceleste S.A. que significaron superar en el historial al equipo de avellaneda, y en un partido que quedó para la historia dando vuelta un 0-3 para terminar ganando 4-3, y la buena racha en el resto de los clásicos, especialmente de local.
Con un Bilos que pasó 5 de los 6 meses que estuvo en el club lesionado, y en los partidos que jugó mostró un nivel de juego inferior al de Emiliano Díaz (con todo lo que eso significa). El juvenil Lautaro Formica, jugó un sorprendente partido debut-despedida, mostrando un gran nivel (solo tuvo un error que lamentablemente terminó en gol) y que daba para ilusionarse. En cuanto a los hermanos Díaz, ambos demostraron que no tienen nivel para jugar en primera, ni en el equipo de suplentes de los entrenamientos. Romeo tuvo poco rodaje (recordemos que no fue un jugador pedido por el entrenador) pero que apareció en partidos clave, como el partido con la empresa nombrado anteriormente. Aguirre, tema aparte. El comentario de los juveniles lo voy a dejar para más adelante y el comentario de la novela San Lorenzo-Ramón-River, se hizo en otro post.
Envueltos en los festejos del campeonato/centenario, recibimos una Copa Libertadores que apuntaba a ser la de San Lorenzo de una vez por todas, se mantuvo una base del campeonato anterior (solo se vendió a Gastón Fernández, Osmar Ferreyra, quien había levantado su nivel notablemente, volvió a Rusia por el vencimiento de su préstamo) y nuevamente con una “ayudita” del grupo inversor se produjeron incorporaciones sorprendentes e interesantes, Placente fue el primero en desembarcar, luego D’Alessandro (después de un ida y vuelta que hubo con su contratación), y Bergessio (otra novela de verano). Para variar, las incorporaciones llegaron sobre la fecha de comienzo de campeonato, menos Placente que fue el único que hizo la pretemporada casi completa con el club y Bilos, quien venía completamente fuera de estado por las continuas lesiones que había sufrido el campeonato pasado, pudo hacer la pretemporada al 100%; en el medio, resarcimiento económico al representante de Diego Placente por concretar la venta con San Lorenzo (¿?), resarcimiento económico a Silvera por haberse rechazado una oferta del exterior (¿?), se rechazó una oferta por Orión por una suma de dinero que no se ofrece por ningún arquero en el ámbito nacional y se rechazó una oferta muy importante por Bottinelli; del caso Saja vamos a hablar más adelante. Se formó el mejor plantel del campeonato argentino, hasta podría llegar a decir que uno de los mejores planteles de Sudamérica y uno de los mejores planteles que ha formado San Lorenzo para enfrentar la Copa Libertadores y el campeonato en los últimos 10 o 15 años y sin embargo el equipo nunca mostró un funcionamiento eficaz ni jerárquico, ni si quiera en los partidos que podía lucirse tranquilamente como contra San Martín de San Juan, Real Potosí de Bolivia (partido de local), Corinthians de Brasil (local y visitante), Caracas de Venezuela (local y visitante), River (tanto en los partidos por la Copa como en los del campeonato), Liga Universitaria de Quito (partidos de ida y vuelta), Blanquiceleste, Gimnasia y Esgrima de La Plata, Huracán, A.A.A.J., Independiente, y algún otro partido que en este momento no recuerde, hasta esos que ganamos por una diferencia holgada, lo hicimos de contragolpe esperando muy atrás o por errores del rival y no por aciertos nuestros, a pesar de eso, algo que no se puede discutir es la entrega que los jugadores dieron en cada partido disputado, ya sean los “titulares” o los “suplentes”, el problema es que no todos los partidos se pueden ganar solo con entrega, se necesita también un buen funcionamiento de equipo, y eso no es algo que haya quedado plasmado en un 100%, hubieron partidos que tuvimos destellos de buen fútbol (sin ir más lejos recordemos el segundo tiempo en Potosí y el segundo tiempo en Nuñez) que lamentablemente no se mantenían en el transcurso de todo el partido; esto lo puedo dejar argumentado con el partido que significó la despedida de la copa, en el cual la entrega no fue suficiente para ganarle a un equipo que era ganable en los dos encuentros disputados. El equipo daba la impresión de que para jugar bien, necesitaban estar en una situación comprometida, ya que parecía que salían a la cancha con el partido ganado, debido a que era notable la diferencia en cuanto a nombres entre nuestro plantel y el plantel contrario (sea cual fuere este). A esto tenemos que sumarle la poca influencia de San Lorenzo en AFA en referencia a la designación de los arbitrajes, y a la forma de arbitrar, como así también en la Confederación Sudamericana de Fútbol por los mismos motivos (todos sabemos como se dirige a San Lorenzo ya sea de visitante o de LOCAL que es lo más preocupante).

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NUEVA EDICION DEL CLASICO BARRIAL

En en día de hoy tenemos la oportunidad de revivir un clásico que estuvo cubierto de polvo durante mucho tiempo, por la ausencia del equipo de Parque de los Patricios, estando este participando del torneo de la segunda división de nuestro fútbol.

Si nos ponemos a reflexionar sobre la nomenclatura de clásico, podríamos sacar varias conclusiones, en principio, vamos a revivir una rivalidad barrial, que tienen la mayoría de los clubes, por nombrar algunos tenemos a Blanquiceleste S. A. e Independiente, Banfield y Lanús, Vélez y Ferro, Belgrano y Talleres de Córdoba, Estudiantes y Gimnasia de la Plata, Newell's y Central de Rosario, River y Boca (¿?) o comúnmente llamado el marketinero superclásico: el paquete más grande del periodismo; aquí quedaron enumerados algunos de los enfrentamientos que se juegan deportivamente a muerte, y San Lorenzo y Huracán no es la excepción a ello, sin ir más lejos, nunca voy a olvidar el 3-0 en el Clausura '95, con goles del "Pampa" Biaggio (2) y Corbalán en contra; a medida que fueron pasando los años, este clásico barrial fue destiñendose, fue perdiendo emoción (estoy hablando sobre los sentimientos de la parcialidad azulgrana), fundamentos que se basan principalmente en la brecha cada vez más grande entre los de Boedo y los de Patricios, ya sea en partidos de ventaja, en campeonatos, en público, masa societaria, o en la que puede ser la justificación más sobresaliente que el resto es sin dudas los últimos años que lo tuvo a Huracán transitando por el campeonato de la B Nacional y simultáneamente las consagraciones tanto en el ámbito nacional como en el internacional de Los Gauchos de Boedo. Este hecho fomentó por el lado del periodismo, que se invente una rivalidad con el club de Liniers, generando en los enfrentamientos con Vélez un clima a clásico, que el hincha de San Lorenzo nunca sintió, debido a que todos los equipos grandes tienen un rival "de toda la vida", y tenían que generarle uno a San Lorenzo, misteriosamente este año, dejó de hablarse de esa pavada; y por el lado de los hinchas, que se acreciente la rivalidad con el equipo de la ribera, tomando este como el verdadero clásico que el hincha quería jugar y ganar principalmente. Ahora cuando nos ponemos a pensar, por un lado decimos que el clásico con Huracán ya no es tan clásico como era antes, por todas las razones antes enumeradas, pero cuando llega el día de jugar con el Globo, todos queremos ganarle, esto abre un interrogante a todos los hinchas ¿Huracán dejó de ser el clásico de San Lorenzo? o la diferencia es tan grande entre un equipo y el otro que el ganar no nos genera nada especial pero sí el perder, porque estaríamos perdiendo contra un equipo de los denominados chicos, ¿Será por eso también que lo hinchas de Huracán siempre que no pierden el clásico lo festejan como un triunfo, o porque no tienen otro rival denominado clásico mas que San Lorenzo?

Este es un tema que sin dudas, dejará pensando a más de uno, en mi opinión, San Lorenzo vs Huracán o Huracán vs San Lorenzo, forma parte de la rivalidad barrial más antigua que tenemos, partido en el cual ninguna de las dos parcialidades quiere perder, ya que ambas andan las mismas calles; puede ser que el sentimiento por ganar este partido no genere ya tanta emoción como por ejemplo ganarle a alguno de los otros 4 clásicos que tenemos con los equipos grandes, pero que seguramente irá creciendo si es que el equipo de Parque de los Patricios sigue manteniendose en Primera División, porque una institución tan grande como la nuestra no podría compararse con un equipo que puede ser habitué de la segunda categoría, que nosotros transitamos, pero que en la cual batimos récords de convocatoria y venta de entradas, superando a los de la A, y creo que queda a simple vista, que Huracán dista mucho de esto...

PRIMER PARTIDO EN EL GASOMETRO

El 7 de Mayo se cumplieron 92 años de un hecho histórico para la historia del Club y del País.

En estos días de gloria que estamos viviendo todos los sanlorencistas, no hay que dejar de lado un hecho histórico tan importante como este.

Sin dudas, el Gasómetro (apodo que adquirió por la estética que presentaba el estadio, ya que no tenía nombre oficial) representa una parte muy importante de la historia de nuestro querido San Lorenzo de Almagro. El partido inaugural tuvo como víctima a Estudiantes de la Plata, cosechando una victoria por un tanteador de 2 contra 1, el equipo que quedará en las páginas de oro del club formaba con J. Coll; De Campo, A. Coll; Saccardo, F. Monti, Urso; Etchegaray, Fernandez, Moggio, Urio, Gianella; los goles fueron marcados por Moggio y Fernandez, mientras que para Estudiantes anotó Lamas; el partido fue disputado ante 200 personas. Este fue el punta pié inicial de grandes hazañas deportivas que se fueron logrando con el pasar de los años, pero la gloria no se alcanzaría solo en el ambiente futbolístico, todas las disciplinas se destacaron en San Lorenzo, la Catedral del Basket se cansó de salir campeona, Delfo Cabrera trajo la medalla dorada en los Juegos Olímpicos; me llevaría mucho tiempo enumerar todos los triunfos deportivos que tuvimos en nuestro querido Templo, en el cual también estuvieron artistas de la talla de Santana, Sandro, los carnavales que convocaban a cientos de personas, la biblioteca, el museo, en fin, cientos de actividades tanto deportivas como culturales que se practicaban en el Gasómetro.
El sueño de aquellos Forzosos de Almagro, devenidos en San Lorenzo de Almagro, se había hecho realidad, pero ese sueño no terminaría allí, el club forjó una tradición y una historia que lo hizo grande, que lo hizo perdurar a través de los años, que se encuentra entre una de las instituciones más grandes el país, y que hoy hace que nos desvivamos por esta pasión de vida.

Sin embargo estos años nos tienen por otros pagos, por un desconocido Bajo Flores, con una tribuna que se acapara bajo un solo grito que no es el grito de gol, pero que es un grito sagrado…

...VAMOS A VOLVER…