Falta de respeto al hincha, a la institución, al dirigente, falta de compromiso con el club y con el equipo, falta de profesionalidad son algunos de los denominadores comunes de estos casos.
Algunos más, otros menos, pero básicamente todos estos casos se parecieron en alguno de los aspectos nombrados anteriormente.
CASO LAVEZZI
La famosa novela del verano, "yo soy un jugador para river", declaraba para el deleite de los periodistas de Olé, Clarín y cía.
Poco le importó que San Lorenzo le haya hecho revertir su carrera trayéndolo desde Europa cuando todavía no era "nadie", tampoco le importó faltarle el respeto a la hinchada y a la grandeza de la historia azulgrana, reclamando un traspaso "a donde sea". Sin embargo, lego de que interviniera Ramón Diaz y lo tasara en "20 palos verdes", y que la dirigencia lo "sancionara" con un resarcimiento económico por el rechazo de la oferta de river, Lavezzi se quedó ese torneo. Luego fue el mejor jugador del campeonato, lo cual nos sirvió para no venderlo a river, y poder regalarlo al Napoli en U$S 8.000.000 (recordemos que independiente no se va a desprender de Denis por menos de U$S 12 millones). Y fue tan grane el regalito que le hicimos al Napoli, que ni piensan en desprenderse de él, a punto de declararlo INTRANSFERIBLE. Negocio rendondo para los tanos.
CASO LEDESMA
Eje central del equipo campeón, pedido exclusivamente por Ramón Diaz. En los últimos años había pasado por clubes de la tala de A.A.A.J., Aldosivi de Mar del Plata, y algún otro equipo similar.
Se metió en el bolsillo al público azulgrana a base de buenas actuaciones partido tras partido. Sin embargo, al finalizar el campeonato, y pasar unos días en México, ante la primera oferta que llegó (Olimpyakos de Grecia) volvió de la mini pretemporada, y con un poco de presión a los dirigentes, logró irse al ¿prestigioso? fútbol griego.
Con solo 6 meses en el club y un contrato a 3 años por cumplir, el "lobo" Ledesma dejó nuestra institución, para sumarse al club europeo, sin importarle que San Lorenzo lo hizo revivir en el punto más bajo de su carrera, tampoco se ve que le seducía tratar de obtener el bi-campeonato y mucho menos la tan ansiada Copa Libertadores (por lo menos ansiada por el hincha).
Tengamos en cuenta que el dinero de la transferencia apenas alcanzaba para recuperar el dinero gastado en la compra del pase.
CASO DIAZ
El hombre que llegó de la mano de Témez y el cual no quería Savino (pero que sí quizo al mercenario, y que optaba por la llegada de Astrada), cambió el club de la noche a la mañana.
En primer lugar, tenía la dura tarea de reanimar a un plantel que venía de un semestre para el olvido. En segundo lugar, tuvo que intervenir en la novela del verano, para retener a Lavezzi y que no emigre a Nuñez, tarea que en un principio consistió en tasarlo en U$S 20 millones de dólares y en tener conversaciones con l jugador para convencerlo (cuantos de nosotros querríamos vestir la azulgrana) de que se quede.
Pidió a Christian Ledesma, se lo trajeron, y fue de lo mejor del campeonato, pidió a la "gata" Fernández y fue uno de los goleadores, declaró que Orión era un arquero de selección, y conformó el plantel que viajó a jugar la Copa América, pidió que se quedara el "malevo" Ferreyra y cambió su imagen, convirtiéndolo , hoy en día, en uno de los mejores jugadores del plantel.
No sólo logró revertir la pálida imagen que el plantel dejó en el Apertura 2006, sino que lo sacó campeón, a un unto de la campaña récord del Ingeniero Sir Manuel Pellegrini, con la valla menos vencida, ganándole con grandes partidos a Boca, Blanquiceleste (0-3 y 3-0), a Independiente (4-3) y empatando con River (0-0), sin haber perdido de local de hecho, solo perdió con Arsenal por la Copa Sudamericana, pero no perdió por torneos locales) ganando todos, menos el empate con River. Revirtió el historial con Blanquiceleste, ganando dos partidos clave, uno perteneciente al Apertura 2006 y el ya mencionado 3-0.
A mediados de año, luego de esta campaña tan exitosa, la gente y frentes opositores al gobierno de Savino, comenzaron a reclamar la renovación del vínculo con Ramón Diaz para asegurarnos que fuera el técnico de la Copa Libertadores. Esto fue postergándose, hasta que en river renunciara Passarella, el conjunto de Nuñez no dudó en ofrecerle contrato a Diaz (quién se había comprometido de palabra con San Lorenzo para ser el técnico del Centenario). Como era de esperar, la oferta y el equipo sedujeron al DT quién ya hasta había hablado de los posibles refuerzos que necesitaría river (olvidándose que San Lorenzo se acordó de él luego de 4 año sin trabajo). Cuando parecía que todo estaba perdido, una reunión clave con el presidente del club, y un grupo empresario "convencieron" al técnico con un jugoso contrato. Más de lo mismo...
CASO SILVERA
El caso más reciente, el goleador del equipo, de 30 años, revivió (cuando no) gracias a que San Lorenzo haya apostado por un jugador de esa edad, adquiriendo el 100% del pase (luego de varias idas y venidas) de un club mexicano.
Es sabido que actualmente, la dirigencia tiene algunos sueldos atrasados, pero se ve que el "Cuqui" andaba en una situación económica algo "complicada", lo que lo llevó a dejar la concentración previo al partido con Banfield, subirse a su Mini Cooper, y hacer una huelga en su casa, reclamando el pago de primas atrasadas.
Profesionalidad, compromiso, compañerismo, respeto, ideales, logros deportivos, son palabras que pasaron de moda.
Luego de este acontecimiento se supo que San Lorenzo había rechazado una oferta del Rayados de México, y nuevamente la figura de Ramón Diaz tuvo que aparecer para convence al jugador para que se quede a jugar la Copa Libertadores.
CONCLUSION
Se ve que los tiempos en los que vivimos cambiaron muchas cosas, jugadores que buscan salvarse económicamente, buscando una transferencia a cualquier parte que cobren en dólares/euros (ya sea Milán, Barcelona... o el FC Moscú o el Panathinaicos de Grecia). Ya no se priorizan los logros deportivos, no se identifican con ningún club (ya no se escuchan la ovaciones a los jugadores previo al pitido inicial), no respetan su historia, su grandeza, o su prestigio (sea el equipo que sea, y si no miremos a Maxi Moralez o a Carrizo), ni tampoco les interesa hacer crecer a la institución en la cual fueron contratados.
Por otra parte, vemos como se firman contratos a largo plazo (3 años como mucho) y ante la primera oferta, emigran, y si no lo hacen bajan el rendimiento notablemente, como forma de expresar su disconformismo. Se inventan excusas (miremos al "Cholo" Simeone) para dejar un equipo (en el cual tenía contrato vigente) para poder sentarse a "charlar" tranquilo con dirigentes de otro club, en el cual ofrecen mucha más cantidad de dinero, y no les importa dejar el equipo previo a una competición tan importante como e la Copa Libertadores. Como dije antes, los logros deportivos y no tienen trascendencia...
Ojalá todo cambie algún día...
